No sé a vosotros, pero a mi me llama la atención cómo
muchas veces se habla de la sangre fría como si fuera algo malo, relacionándolo
con los asesinos y los psicópatas, pero en cambio otras veces se habla como si
fuera algo bueno, se pone muchas veces el ejemplo de quien sabe controlar la
situación y no dejarse llevar por los nervios, se habla mucho de los médicos.
Basándome en lo que dije en la entrada SEGUNDA REGLA:NO TODAS LAS OPINIONES SON IGUAL DE VÁLIDAS, he de decir, que puesto que el
mundo ha sido creado de una sola forma, es totalmente incoherente y absurdo que
una cosa sea buena y mala a la vez.
Entonces, ¿qué es lo que pasa, es algo bueno o es algo
malo?
Personalmente pienso, que esta incoherencia se debe a
que la frialdad y la sangre fría son consideradas como lo mismo, aunque yo
diría que no lo son, así que me gustaría comentar la diferencia entre sangre
fría y frialdad, que aunque puedan parecer lo mismo, creo que la distancia que
hay entre ellas no debería ser ignorada.
La frialdad es la insensibilidad, el ver una
injusticia o algo desagradable y que eso no despierte nada en nosotros, es por
tanto, algo malo. En cambio, la sangre fría es algo bueno, es autocontrol, el
ver una injusticia o algo desagradable y que eso despierte algo en nosotros,
tratando de remediarlo de una forma serena, sin dejarnos agobiar y tratando de
controlar la situación; de ahí que pueda confundirse con la frialdad, porque la
forma de reaccionar de ambas, visto desde fuera, puede parecer igual, pero por
dentro son completamente diferentes, lo veréis con el siguiente ejemplo
Un médico, por ejemplo puede ver heridas muy graves en
algunos pacientes, y aparentemente, se muestra tranquilo, como si no pasase
nada, pero precisamente, como eso no le resulta indiferente procede a sanar esas
heridas. A alguien frío también se le
vería como si estuviese tranquilo, pero la diferencia con el otro, es que se
muestra tranquilo porque no tiene nada
que controlar.
Como ejemplo de sangre fría también puede servir este chiste que me contaron el otro día.
-Oye Manolo, ¿sabes
que ayer salvé a una chica de ser violada?
-Joe Paco, qué
valiente eres, ¿y cómo lo hiciste?
-Muy simple,
autocontrol.
Siguiendo con la metáfora del río de las emociones,
metáfora de la que hablé en la entrada LA VIDA, la sangre fría sería el cauce
del río, que nos ayuda a controlar el fluir de nuestras aguas, y evitar así que
podamos dañar a los demás, aunque no se trata de dejar en un segundo plano a
los sentimientos, se trata de ver de una forma imparcial qué sentimientos nos van
a ayudar a seguir avanzando en el camino y cuáles nos van alejar de él, y actuar en consecuencia, por ejemplo, dejarse llevar por el
optimismo o tener esperanza; y no dejarse llevar por el
odio o el egoísmo. Se trata, en definitiva de armonizar la mente y el corazón,
de hacerlos uno solo.
La imagen de la frialdad sería, por ejemplo, la de un
río helado, en el que las aguas no fluyen, es como si estuviéramos apagados,
muertos por dentro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario